Al hacer conciencia sobre esta definición y pensar en el mundo que heredaremos a nuestros hijos y nietos, degradado por las comodidades que hoy gozamos comenzamos a preguntarnos ¿Cómo puedo yo ser partícipe de la sustentabilidad?, ya mucho se ha hablado acerca de las 3R, reducir, reutilizar y reciclar, y sin dejar de ser muy importantes, se vuelve complejo realizarlas en nuestro entorno diario, no solo por la falta de costumbre o por la propia negligencia, sino porque no visualizamos un impacto directo de estas acciones en nuestro entorno y carecemos de medios para medirlo, todo lo cual genera frustración y abandono de estas prácticas al sentirlas inútiles, ¿cuántos de nosotros hemos iniciado con la separación de desechos domésticos colocando ordenadamente los orgánicos de los inorgánicos solo para ver que al pasar el camión de recolección todos terminan nuevamente juntos en su camino al basurero?

Otra forma de integrarse a la sustentabilidad es cambiar nuestros hábitos de transporte utilizando vehículos no contaminantes, la bicicleta es una muy buena opción, pero seamos honestos, ¿Cuántos nos visualizamos pedaleando hasta la oficina en una ciudad con carencia de infraestructura suficiente para este medio de transporte, sorteando automóviles que no tienen una cultura por el ciclista, arriesgándonos al menos a una caída o ser arrollados por un conductor imprudente?

Entonces ¿Cómo puedo ser partícipe de la sustentabilidad y dejar un mundo habitable para las futuras generaciones?; La respuesta no es sencilla pero si existe, utilizando tecnologías limpias, algunas soluciones de transporte basadas en ellas son los automóviles híbridos y eléctricos, motocicletas y bicicletas eléctricas, estas están basadas en la generación de electricidad a través de movimiento y almacenada en baterías para su utilización cuando sea requerida; Pero también existen tecnologías limpias que no tienen que ver con el transporte, algunas que podemos utilizar en nuestra casa sin alterar nuestros hábitos, por ejemplo iluminación led, o estufas y calentadores eléctricos. Suena bien, pero inmediatamente viene a nuestra mente como se incrementaría el recibo de la luz, que dicho sea de paso aumenta su costo cada mes; sin embargo, gracias a la reforma energética cualquier persona o empresa puede generar su propia energía a través de tecnologías limpias como los paneles solares. Como vemos, la sustentabilidad si está a nuestro alcance, y podemos ser parte de ese cambio, depende de nosotros tomar la alternativa que consideremos más adecuada para integrarnos, y como dijo Sir Baden Powell “Dejemos este mundo en mejores condiciones de cómo lo encontramos”.